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La figura del integrador social se ha reforzado y ha aumentado su autoridad con el paso del tiempo. Cada vez son más los colectivos que necesitan profesionales que les ayuden con sus dificultades concretas en los ámbitos sociales y de relación con el entorno.
El técnico en integración social es el profesional que se encarga de intervenir en los grupos sociales para prevenir y/o solventar cualquier caso de exclusión.
Por esta razón, debe ser una persona con grandes conocimientos de los colectivos sociales y de las técnicas de intervención adecuadas en cada caso.
Los integradores sociales deben ser personas pacientes y responsables. A la hora de trabajar deberán ser organizados, flexibles, perseverantes, resolutivos y prácticos para ser capaces de resolver todos los contratiempos que surjan.
Las habilidades comunicativas y sociales también son de gran importancia a la hora de trabajar con estos colectivos y la empatía para poder ponerse en el lugar del otro y ser capaz de entenderle mejor.
Los integradores sociales son personas con vocación en la atención, el servicio y el cuidado de las personas y los colectivos. Estos profesionales trabajan en empresas que lleven a cabo acciones educativas con sectores en dificultad social y en el sector de los servicios socioculturales y de comunidad realizando acciones educativas con los cuidados personales y atención sanitaria con personas mayores o con discapacidad física, psíquica o mental entre muchos otros colectivos.
El técnico en integración social se encarga de realizar intervenciones especializadas y concretas. Este profesional lleva a cabo actividades como la formación o el asesoramiento a través de charlas y talleres grupales o individuales entre otras cosas.
La función más clara del integrador social es la intervención directa con las personas que se encuentran en alguna situación de exclusión o riesgo social, para ello, programa, organiza, implementa y evalúa dichas intervenciones.
El integrador social debe aplicar técnicas y estrategias muy concretas teniendo en cuanta las necesidades del colectivo con el que va a trabajar. Además, debe promover la igualdad de oportunidades y garantizar la creación de entornos seguros para los destinatarios.
Los técnicos en integración social se encargan de entrenar las habilidades de comunicación de los colectivos a través de los sistemas alternativos con los que cuentan y motivando a las personas a su utilización.
Entre sus tareas deben realizar tareas de mediación entre personas y grupos aplicando las técnicas participativas y de gestión de conflictos correctas en cada caso.
El integrador social se encarga de organizar, implementar y evaluar los programas de inserción laboral y ocupacional y de entrenar las habilidades de los colectivos en cuestiones de autonomía personal y social, violencia de género, etc.
La integración social se encarga de llevar a cabo procesos por los cuales los recién llegados a un entorno o las minorías puedan incorporarse a la sociedad.
La integración social trabaja con personas con dificultades para integrarse o que se encuentren en procesos de marginación a que puedan participar en el bienestar social de un determinado entorno.
Las intervenciones que se realizan en integración social buscan brindar a estos colectivos una mejor alternativa y prevenir su marginalización en la sociedad.
En la gran parte de los casos, la educación es utilizada como mecanismo para la promoción social.
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