El sector inmobiliario cada vez es más competitivo. Existen numerosos profesionales dedicados a este sector ya sea como agentes inmobiliarios, asesores, brokers, etc. Pero los que destacan son aquellos que reúnen ciertas habilidades o características.
Si te estás planteando hacer un curso de agente inmobiliario para entrar en este sector, te recomendamos que revises estas capacidades para qué reforzar de tu personalidad para ser un gran agente inmobiliario y tener así mayor éxito en el mundo laboral.
1. Un agente inmobiliario es un buen comunicador
Ser un buen comunicador es posiblemente una de las habilidades clave a la hora de ser un buen agente inmobiliario.
Tanto la comunicación verbal como la no verbal deberá adaptarse a cada cliente. Este punto es fundamental ya que si no eres un buen comunicador será muy difícil que tengas éxito en otros aspectos, como generar confianza, ser persuasivo o tener capacidad de negociación.
Algunos puntos clave a tener en cuenta en el proceso comunicativo con el cliente son los siguientes:
- Mantener el contacto visual con el cliente
- Tener una comunicación constante
- Resolver las dudas del cliente de forma clara y directa
- Optar por el tono adecuado
- Informar al cliente de todos los pasos y procesos por lo que pasará en el caso de que decida comprar la vivienda.
- Una vez que el cliente se decida a comprar deberemos acompañarle en el proceso informándole de todos los pasos y transmitiendo confianza.
2. Un agente inmobiliario es empático
La compra de una vivienda es un proceso complejo y, generalmente, al comprador le falta mucha información. Por eso, el agente inmobiliario debe ser extremadamente empático y no dar nada por hecho. Escuchar al cliente, conocer sus gustos e intereses y ofrecerles opciones que se adapten a ellos será clave.
Asimismo, ser empático te facilitará encontrar los momentos en que el cliente está más receptivo e incluso te permitirá adelantarte a sus necesidades.
Presta atención a tus clientes y los resultados serán mejores.
3. Un agente inmobiliario transmite confianza
La confianza será uno de los principales pilares en el éxito laboral de un agente inmobiliario. Ser capaz de transmitir confianza es una habilidad muy ligada a los puntos anteriores y claramente es un básico de este negocio, si no transmites confianza a tus clientes será muy difícil poder cerrar una venta. Ser honesto con la información que se le da al cliente fortalecerá esa confianza. El trabajo del agente inmobiliario no consiste solamente en vender, sino que también debe asesorar durante todo el proceso de compra dando las opciones adecuadas. Tener el foco en ayudar al cliente ayudará a que el cliente esté tranquilo y que crezca su confianza en el agente.
4. Responsabilidad
La responsabilidad es otra de las cualidades claves del agente inmobiliario y demostrar esa responsabilidad durante todo el procedimiento de venta reforzará la imagen de profesionalidad.
Un agente inmobiliario responsable es puntual, mantiene al cliente informado, es honesto y además mantiene su profesionalidad durante todo el proceso desde la primera llamada hasta que se cierra la venta.
5. Capacidad de negociación
Una de las capacidades más claras y la que suele venir primero a la cabeza cuando pensamos en un agente inmobiliario es la capacidad de negociación.
La venta de una vivienda debe ofrecer las mejores condiciones tanto para el vendedor como para el comprador, por eso el agente inmobiliario debe velar por que haya una buena negociación entre vendedor y comprador.
Poseer técnicas de negociación será clave para ser un buen agente inmobiliario. Tener experiencia laboral previa en trabajos en los que negociar fuese un requerimiento es un plus, ya que será más fácil conocer estrategias de negociación eficaces.
6. Organización y autogestión
Todo agente inmobiliario se encontrará con que tendrá que llevar a cabo multitud de tareas diferentes en su día a día. La cantidad y diversidad de las tareas hace sencillo abrumarse por el volumen de trabajo, por este motivo ser capaz de organizarse y autogestionarse es clave para realizar el trabajo de agente inmobiliario de forma eficaz.
Utilizar herramientas de gestión, calendarios, recordatorios, etc. puede facilitar el trabajo organizativo permitiendo al agente inmobiliario ser mucho más eficiente.
7. Proactividad y dedicación
Hacerse un hueco en un mercado tan competitivo como el mercado inmobiliario precisa de proactividad, es decir, necesitarás tener iniciativa propia adelantándote a la competencia y conociendo siempre las últimas tendencias del mercado.
Además, la profesión de agente inmobiliario requiere de una gran dedicación para poder dar soporte a los clientes cuando lo necesiten. El teléfono móvil siempre estará a mano.
8. Persistencia
Ser persistente es un punto clave en el proceso de venta de un inmueble. La compra de una vivienda no es algo que se tome a la ligera y, por tanto, los diferentes clientes tendrán dudas y miedos, por ese motivo no debes rendirte ante la primera adversidad.
Sin dejar de lado la empatía, tras una negativa es recomendable buscar un cambio de enfoque y entender qué es lo que el cliente necesita para cerrar la venta.
Además de las características mencionadas en este artículo existen muchas otras capacidades que te podrán ser útiles si te decides a prepararte para ser agente inmobiliario. En este artículo hemos resumido las más importantes.
Si te interesa este tema, puedes encontrar más información sobre ser agente inmobiliario en este artículo. También tienes información sobre las profesiones del sector inmobiliario en este artículo.